Estados Unidos. – Tras un fin de semana especialmente sangriento, el gobernador del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo, ha anunciado este martes la declaración del estado de emergencia para afrontar el repunte de la violencia armada “como lo que es, un problema de salud pública”. “La declaración nos permitirá dedicar a esta crisis toda la atención y los recursos que precisa”, ha dicho Cuomo en un tuit.
El veterano político demócrata, en la recta final de su tercer mandato como gobernador del Estado, ha firmado este martes una orden ejecutiva, si bien sus planes de excepción fueron hechos públicos la víspera, tras conocerse los datos relativos a incidentes con armas de fuego durante el largo fin de semana festivo del 4 de julio: más de 150 muertos en 400 tiroteos registrados en todo el país. El Estado de Nueva York registró 26 de esas muertes, en 21 tiroteos, según el cómputo que establece Gun Violence Archive, en el periodo comprendido entre el viernes y el lunes, ambos incluidos. Este lunes fue festivo, por coincidir la celebración de la independencia del país en domingo.
Aunque todas las grandes ciudades del país experimentan el fenómeno, Nueva York ha visto multiplicarse exponencialmente las tasas de violencia armada desde que se inició la pandemia, en marzo de 2020. La cifra del festivo del 4 de julio ha sido menor que la registrada en el mismo periodo de 2020, cuando fallecieron 30 personas en 25 tiroteos, según los datos del Departamento de Policía. En lo que va de año, sin embargo, el incremento de la violencia armada en la ciudad ha alcanzado el 32%, por lo que la tendencia monopolizó la campaña electoral a las primarias demócratas. Fuentes locales elevan a 51 el balance de muertos en todo el Estado.
Los planes de Cuomo para abordar el fenómeno incluyen el cruce e intercambio de datos sobre incidentes entre los departamentos policiales del Estado y un mapeo de los escenarios donde se producen los tiroteos, así como impedir el acceso a armas de fuego a personas consideradas de riesgo por sus antecedentes, ha explicado el portal informativo The Hill. Cuomo también ha anunciado un plan de empleo juvenil para el verano, en colaboración con negocios locales, para jóvenes en situación de alto riesgo, una medida muy parecida a la lanzada por la precandidata demócrata a la alcaldía de Nueva York Kathryn Garcia. El plan propuesto por Cuomo, con una financiación de 57 millones de dólares, pretende crear 21.000 puestos de trabajo para alejar de las calles a jóvenes en situación de exclusión o riesgo extremo. Se considera que la mayoría de los incidentes con armas de fuego están vinculados a la actuación de bandas y pandillas.
“Vamos a contratar a jóvenes, a formarlos, a facilitarles el acceso al mercado de trabajo, pero no se trata sólo de darles un empleo, sino la oportunidad de iniciar una carrera laboral bien remunerada cuando acaben la escuela, de manera que no consideren ese empleo una solución provisional”, ha declarado Cuomo en un acto en la escuela de Derecho John Jay, en Nueva York. “Puedes ser carpintero, electricista, tendero… puedes tener todo un futuro por delante”, añadió el gobernador, en entredicho desde el pasado enero por una serie de acusaciones de acoso sexual y por su gestión de la pandemia en las residencias de mayores.
